September 12, 2023

22 on the 11th...

Hace 670 días decidimos empezar esta preciosa aventura llamada nuestra relación. Debo admitir que en el momento, no sabía qué tanto íbamos a durar, por más que yo quisiera que fuera por siempre, no tenía por seguro cómo iban a ser las cosas. Me animé a estar en una relación contigo aunque fuera algo muy out of character de mi parte, aunque fuera algo que nunca antes había hecho y aunque fuera algo que definitivamente me desconcertaba pues no lo vi venir.

Hoy, 22 meses después, puedo confesarte con toda la sinceridad de mi corazón, que es la mejor decisión que pude haber tomado. Mi yo de 19 años que probablemente no sabía a qué había accedido, está feliz de haber acertado contigo. Mi yo de 20 años, a pesar de los momentos difíciles y de los días donde se cuestionaba por qué tenías que estar tan lejos, aprecia cada segundo a tu lado. Y mi yo de 21, entiende que tuvimos que pasar por todo eso para poder ser lo que somos hoy. Mi yo de 21 años está enamorada de ti y de lo que tenemos. Mi yo de 21 años sabe que no hay nada en este mundo que preferiría más que estar contigo. Mi yo de 21 años ansía el momento en que por fin nos conozcamos y estemos juntas. Mi yo de 21 años quiere que le creas cuando te dice que a pesar de todo lo que pueda venir en un futuro, estaremos juntas.

Sé que habrá momentos difíciles ahora que tenemos más cosas que hacer y que probablemente la uni me consuma más de lo que me gustaría, pero mi lugar seguro siempre serás tú. Siempre que tenga un mal día, siempre que tenga un chisme, siempre que necesite un descanso, siempre que necesite escuchar tu voz, siempre que necesite sentirme en casita, sé que estás a una llamada de distancia y aprecio muchísimo que puedas darme esa seguridad.

En mi mente llena de TLP hay muchas cosas que quisiera cambiar, hay muchas cosas que quiero dejar, hay muchas cosas que no me hacen feliz, que deseo ignorar, que quiero olvidar, pero ninguna de esas eres tú. Me es muy difícil querer algo que sea constante, me es difícil no cansarme, me es difícil no querer echar a correr y olvidarme de todo porque quizá a veces soy demasiado impulsiva y extremista, pero te juro que eres lo único que no quiero cambiar o perder.

22 meses me han enseñado que todo puede estar mal, que quiero lanzarme de una bahía, que hay días terribles y emociones que me ahogan. 22 meses me han enseñado que a pesar de todo eso, si pienso en ti, puedo ser feliz. Si pienso en ti puedo tener un poco de claridad. Si pienso en ti puedo sentirme más tranquila.

Si bien hay muchas, muchas cosas que aún nos faltan experimentar, porque 22 meses no es nada comparado con el resto de nuestras vidas, si de algo puedo estar segura es de que aunque nos arrastre la vida, nos putee una roca y nos zarandeen las olas, siempre pensaré en ti, en nosotras, en lo que tenemos y cualquier complicación se verá mil veces más pasable. En el momento será horrible y quizá sentimos que nos estamos lastimando o que algo estamos haciendo mal, pero sé que encontraremos la manera de salir adelante, de amarnos más que el día anterior y mirarnos como si estuviéramos sosteniendo el mundo en nuestras manos.

Eres mi todo. Te lo he dicho una infinidad de veces en estos 670 días a tu lado, pero nunca está de más.

Ten en mente que siempre serás todo para mí.

Te amo con todo mi ser, mucho más de lo que crees.

Felices 22 meses, amor de todas mis vidas.