September 4, 2022

EL REINO ANGÉLICO III

INTRODUCCIÓN AL FOLLETO "EL ARCÁNGEL MIGUEL, SU OBRA Y SUS AYUDANTES" (1953)

por el Arcángel Miguel

Algunos hombres, de pie al borde de ese abismo... mirando sin esperanza a través de su vacío aparentemente infranqueable, concluyen que después de la experiencia en el reino físico no existe nada más. En su conclusión hay algo de justicia, ya que sus ojos se oscurecen ante los débiles contornos de lo eterno que brillan en la distancia y sólo perciben y sienten la desesperanza del "callejón sin salida", la finalidad del viaje, cuando los afilados acantilados caen abruptamente bajo sus cansados pies. Estas personas se acuestan en el desánimo y pasan de la pantalla de la vida a descansar, por un tiempo, en el misericordioso olvido del sueño llamado "muerte". Otros, después de maldecir amargamente la brújula del corazón que les ha conducido al borde de la nada, vuelven sobre sus pasos y encuentran satisfacción temporal en saciar los sentidos y estimulan rebeldemente el impulso del alma hacia los senderos que aparentemente conducen a "pastos más verdes."

Y los pocos, con la dulce esperanza de la Tierra y la alegría del Cielo valorando tranquilamente la situación, esperan hasta que sus ojos espirituales estén afinados para actuar por ellos en esta nueva medida, cuando -por fin- puedan ver la orilla más lejana -algunos con claridad, otros como un mero esbozo de esperanza y promesa-, pero una vez asegurados, estos pocos inclinarán las experiencias de la vida a la elaboración de un camino y medios para alcanzar esa dulce orilla. Atraviesan el abismo - en alas de la fe, en la conciencia levitante, en la visión proyectada, en la fuerza del alma de quien ha aprendido el camino de ida y la renuncia desinteresada al camino de vuelta.

Las benditas corrientes de vida que se ofrecen a hacerlo son los constructores de puentes de los que dependemos para tender los cables a través de los cuales todos los hombres recibirán un día las Direcciones de los Libres-en-Dios.

Los Discursos de este folleto están preparados para estos pocos. Que mi bendición personal descanse sobre el corazón y el alma de todos los que leen, y haga de ellos tales constructores de puentes, hasta que la Hueste Angélica tenga un Puente de Luz construido con la fe, el amor y las aspiraciones de la humanidad, y sobre esta carretera puedan caminar libremente hacia la asociación con los que elijan tomar sus manos, compartir su visión y adorar a Dios en obediencia a la Ley de Armonía y Amor, la llave tonal del Reino de los Cielos.

Compilado de las Enseñanzas del Puente a la Libertad por Werner Schroeder

Arcángel Miguel