September 7, 2017

ES LO QUE HAY

La momia de Tutanmamon se despertó tras un profundo sueño de más de tres mil años. Se frotó los ojos, estiró los brazos y mirando a su alrededor se percató de la presencia de un señor vestido de gris.

-Oiga, señor, puedo hablar con el encargado de embalsamamientos.

-Perdone, pero esto es un museo y aquí no hay embalsamadores. Yo soy el director-se presentó el señor vestido de gris-puedo ayudarle en algo.

-Si, verá, señor, cuando me embalsamaron y tras ponerme las consiguientes vendas, tal vez por un descuido, no quiero culpar a nadie, que conste, una piedrecita del tamaño de una nuez, aproximadamente, digo yo, se me quedó incrustada en la raja del culo y, la verdad, he soportado con paciencia las molestias que la dichosa piedrecita me ha producido, pero la paciencia tiene un límite. ¡ande, toque, toque!

-¡Señor Tutanmamon, que hay videocámaras!