Sólo hay dos cosas seguras en la vida: la muerte y los impuestos. Por desgracia, la certeza de los impuestos es algo discutible. Aunque siempre pueden ocurrir, puede ser difícil evaluar con éxito su propia carga fiscal. Para los particulares, esto puede llevar a una auditoría y a multas. Para una empresa, esto puede llevar a algo mucho peor. Si está preocupado por su responsabilidad fiscal, su mejor opción es ponerse en contacto con un abogado tributario. Ya sea que quiera tener representación contra el IRS o simplemente asegurarse de que su negocio está configurado de tal manera que los impuestos pueden ser minimizados, estas personas pueden ser de gran servicio.
Hola, mi nombre es Ricardo Acosta, yo soy co-fundador de Idem y en este artículo quiero compartir la visión de la educación que tenemos desde Idem y como es que desde nuestra organización buscamos construir un país más justo, descentralizado y equitativo en oportunidades.