April 17

to the girl i love most in the whole world;

Andrea, mi Andy, mi Síara. Aún no puedo creer que estoy celebrando tu cumpleaños por sexta, ¿séptima? vez. Constantemente me pregunto qué habré hecho tan bien en mi vida anterior para tenerte a ti como una presencia incondicional, alguien que siempre me cuida y que vela por mi felicidad, que no teme a decirme la (a veces dura) verdad porque en el fondo, quiere lo mejor para mí. Me parece increíble lo afortunada que soy de tan solo que me permitas existir en tu órbita, más aún de que me consideres de tus seres más cercanos.

Dios, hemos pasado por tanto, tanto, tanto. Nunca me hubiera imaginado que llegaríamos a este punto; de ser así de cercanas, de conocer nuestros pasados, a nuestras familias, hacer llamadas y videollamadas al momento que cualquiera pueda y conversar como si nunca hubiéramos dejado de hablar. Sé que lo he dicho bastante, pero estoy eternamente agradecida de haberte conocido, de que vieras algo interesante en mí y así integrarme en esa amistad tan hermosa que tienen con Isabella. Ustedes son el regalo más lindo que me dio el universo, no hay día en que no agradezca que sean mis almas gemelas, mis hermanas del alma.

Andrea, te soy completamente sincera cuando te digo que eres una de las personas que más admiro en esta tierra. Estoy inmensamente orgullosa de ti, de todo lo que eres, de todo lo que has logrado. Porque en este tiempo que hemos tenido juntas he visto tanto, he visto tu dolor, tus miedos, todos los obstáculos que tuviste que atravesar para estar donde estás hoy. Te he visto dar tus más hermosas sonrisas en días que tal vez no las sentías verdaderas, he visto entregar todo lo que tienes a personas que no lo merecen pero por sobretodo, te he visto levantarte. Lo sé perfectamente porque estuve ahí para ofrecerte mi mano y todo el amor que tengo para dar para poder sosegar cualquier dolor que pudieras sentir. ¡Y aquí estás, mi vida! Estás tan hermosa, tan fuerte, tan grande y mucho más madura que cuando nos conocimos (convengamos que teníamos 17 y hacíamos un montón de pelotudeces igual). Mi punto es, que a lo largo de estos seis años te vi superar cosas que mucha gente no habría sido capaz de lograr. Tomaste las pruebas que el destino puso en tu camino y declaraste victoria. Porque como dijo Cristina Yang: Eres una fuerza de la naturaleza, eres imparable. Dios, te juro que no hay nadie (además de Isa) que esté más orgullosa de ti que yo.

Me enseñaste tanto, muchas veces inconscientemente. Me enseñaste a ser fuerte, a ser valiente y por eso mismo hace mucho tiempo decidí que soy tu mayor fan. Te puedo asegurar que siempre estaré deseando que ganes todo lo que tu corazón desee tener. Quiero verte alcanzar todos y cada uno de los sueños que tienes, quiero seguir viéndote crecer y vivir tu mejor vida. Quiero que cada cosas que alguna vez me dijiste que querías, la tengas, aun si no estoy fisicamente ahí para verte obtenerlo. En tu corazón siempre tienes que saber que hay alguien aquí, al otro lado del mundo que está apoyándote y siendo tu cheerleader personal.

Anhelo el día en el que te tenga frente a mí, en el que pueda correr a tus brazos y no soltarte más, ni a ti ni a Isa. Es uno de mis sueños más grandes y estoy segura que la vida me llevará ahí, algún día estaré en un avión en camino a verlas y de tan solo pensarlo ya sé que será uno de los mejores días de mi vida.

Muchas veces dicen que las amistades a distancia no funcionan, mucho menos las de tres pero creo que ese no es el caso. Nosotras funcionamos, ¿no crees? No tenemos el mismo tiempo que antes, ni hablamos diariamente como solíamos hacer pero esa complicidad, esa confianza de llegar y contar algo nunca se va y eso para mí es prueba de que nuestra amistad es la prueba en vida de que sí se puede. O tal vez somos la excepción a la norma, quien sabe. Sea como sea, esta amistad es mi mayor tesoro y planeo cuidar(las) a como de lugar.

Gracias por llegar a mi vida, Andy. Gracias a todas las estrellas del cielo que me permitieron conocerte porque si no lo hubiera hecho, dudo mucho que estaría donde estoy hoy. Eres parte fundamental de mi crecimiento, de mi día a día. Tú e Isa siempre son mi cable a tierra, creo que no podría pedir nada mejor que eso.

Feliz cumpleaños, mi cielo. Este nuevo año deseo que todo lo que te propongas lo logres, te deseo mucho éxito y felicidad. Recuerda, siempre estoy tan solo a una llamada de distancia. Te amo, te amo, te amo con cada pedacito de mi alma.

Nos vemos el próximo año, same place, same time!

Yours truly,

Keyt.