El culo de mi loca prima 1,2,3.
Esta es la historia de cuando conocí a mi prima Gabi, por parte del hermano de mi madre que ya hace años se había ido a otro país a trabajar, nos conocimos por primera vez en persona haya por el 2014, si había hablado con ella antes, pero esa fue la primera vez que la vi supe que la quería en mi vida.
La conocí usando unos shorts súper cortos y con una camisa corto dejando expuesto su plano vientre color canela, aun sin ser su edad madura sus grandes caderas y gordos muslos ya señalaban que iba para ser una de esas bellezas que atrae todas las miradas en la calle, pero se debía señalar la falta de pecho ya que, no presentaba mucho.
Pero aun así sentir ese primer abrazo basto para atraparme entre sus malditas garras, -Primito que bueno es por fin conocerte-, Me dijo Gaby con una sonrisa, -Si... También es un placer por fin verte-, Automáticamente me di una palmada mental en la cabeza, parecía que le estaba gritando mis intenciones, así que rápidamente decidí saludar a mis tíos, cosa que también hiso mi prima.
¿Pero fue mi imaginación o mi prima me dio una mirada... extraña?Habían venido por las fiestas después de tanto tiempo de estar separados y haber estado en contacto únicamente por llamadas y video llamadas, mi prima estaba en su celular y yo solo estaba ahí sentado al otro lado de la sala, intentado hablar con ella...
No la conocía, solo hable un puñado de veces con ella, y esas conversaciones fueron insignificantes, me imagine que tenía un novio, guapo y atlético esperándola, sus amigas hablando de quien es el más guapo de sus conocidos, y no sé qué más.
Pero de la nada, mi prima Gaby levanto la mirada de su celular y me lanzo otra extraña mirada, a pesar de que me descubrió levanto su celular y me tomo una foto, no sé si alguien más en la habitación vio eso, pero sé que me tomo una foto.
-¿Tía Cristina podría usar el baño por favor?-, Pregunto mi prima así sin más, -Claro sobrina, Ivan, hazle a favor de llevar a tu prima-, Dijo mi madre, -¡Sí!- Dijo creo que algo más entusiasmado de lo que debería haber sido, lo cual me hizo sentir algo avergonzado, pero bueno, solo me unas cuantas miradas, antes de escuchar las risas de todos, -Se somos como extraños para ti, pero no te preocupes-, Me dijo mi Tío Edgar, dándome una palmada, así que camine todo rojo con mi prima detrás de mí.
Podía escuchar cómo le caían más mensajes y reuniendo todo mi coraje logre lanzarle una pregunta; -¿Y quién te escribe tanto, tu novio?-, Casi lanzo la pregunta como un grito, pero logre controlarme, -Si-, Me respondió lo que casi hace que me detenga y grite de ira, pero agrego, -Está rompiendo conmigo el muy pelotudo y una de mis ex-amigas me mando fotos de ellos dos juntos, y yo acabo de filtrar su pack-, Cosa que me hizo parar para mirarla fijamente por un momento creo que con incredibilidad, -Nadie puede joderme primito-, Dijo en respuesta a mi cara.
Cuando llegamos le dije que la esperaría abajo con los demás, pero en vez de eso, me tomo de la mano y me jalo con ella al baño, cerró la puerta y mire con incredibilidad nuevamente como se baja los pantalones y se sentó en el inodoro, parado ahí con mi tercera cara de incredibilidad del día, escuche como hacia pipi, ella me miro sin ninguna expresión en su rostro, y yo creo que, por mi cara, parecía que me estaba preguntando ¿Qué coño está pasando hoy?
Lo que me saco de mi estupor fue el hecho de que nuevamente me tomo una foto, ¿Oye que haces?, Le pregunte después de eso, -Si dices algo de hoy, le mostrare esta foto a mi Tía Cristina y le diré que entraste a la fuerza-, Wow, bueno esto bajo puntos, ¿Que carajos estaba pasando con ella? ¿Qué carajos es esto? ¿Por qué coño quiero ese culo?
-Escucha primito, porque sé que desde que pase el umbral de la puerta de esta casa, tus ojos, no se apartaron de mí, cuando te abrase pude sentir la necesidad en ese abrazo, ¿Además no tienes novia verdad?-, Dijo todo eso a la par que tomaba un poco de papel higiénico, -No-, Respondí sin más, y luego mi prima me hizo una seña con el dedo para que me acercara, y al hacerlo tomo mi mano y coloco el papel en ella y luego lo dirigió hacia su coño, para dejarme limpiarlo, me quede en esa pozo inclinado sobre ella por unos buenos 3 minutos, -Disfruta tocar tu primer coño-, Dijo esto mientras movía poco a poco el papel, una vez que sentí ese coño limpio tire el papel a la basura entonces ella se levantó, se acomodaba el short y se acercó a mí.
Para bajar el cierre de mi pantalón y sacar mi erecto pene, -Hola, es un placer conocerte-, Dijo antes de retirar el prepucio y exponer la cabeza de mi pene virgen, saco su lengua y comenzó a pasarla suavemente alrededor, ella me saco varios gemidos solo con eso, dios me pregunte cuantos hombres habían pasado por esa boca, para que ella tenga esa experiencia, pronto paso a tomar mi pene por completo.
Su succión fue fuerte, quería esta vez por la fuerza arrancarme gemidos, y lo hizo, un vaivén en perfecta sincronía comenzó en su boca, no podía moverme fue tan surreal el sentir esa lengua enrollarse en su boca, no pude moverme, no quería romper esta conexión tan irreal.
Pronto la mamada paso hacer más intensa, creo que, alertada por los gemidos, paso a tomar mis caderas he intentar meterse cuanto pudo en su boca, (No quiero presumir ni mentir en el hecho, de que tengo un pene gigante, pero a pesar de mi corta estoy bien equipado, solo eso diré) incluso procedió a intentar tomar mis bolas en una solo engullida, las arcadas que estaba dando y la excesiva cantidad de saliva que estaba en el piso me alarmo, creí que iba a vomitar, pero no fue así, esos últimos tres gloriosos movimientos de su boca, hizo que me corriera casi en su garganta y su feroz agarre evito que me separara de ella.
Un minuto completo en esa posición, su cara roja, con las venas marcadas en su cuello, conteniendo con fuerza las lágrimas, escuchando como mi prima obliga a su garganta tragarse esa corrida.
Cuando al fin se separó de mi pene, dejando un hilo de saliva atrás, respiro pesadamente antes de preguntar, -¿Tienes tele y consola en tu cuarto?-.
Asentí en afirmación, -Bien-, Dijo mientras habría el botiquín y me pregunto -¿Cuál de todos es tu cepillo de dientes?-, Le señale el azul, -Bien, limpia el piso y ve a prender la consola, coloca cualquier juego de 2 jugadores ya llego en un momento-, Dijo esto mientras comenzaba a cepillarse los dientes, -Pero... no debemos volver con...-, Me calle de inmediato cuando me volvió a ver, era ira pura, con esa mirado me decía, "Haz lo que te digo ¡YA!"
Rápidamente lo hice limpien el suelo, y salí corriendo a mi cuarto, encendí mi Xbox 360 y coloco el Injusticia, estuve por un momento ahí sentado y escuche a mi prima llegar, -Cuando tu madre llegue sígueme la corriente ¿Entendido?-, Me dijo ella a lo que en respuesta solo volví a asentir.Mi prima empezó a reír, aunque fuera forzada la risa, parecía genuina y predicho por ella, pronto mi mamá llego, se notaba molesta pero se sorprendió cuando nos encontró jugando en la consola, -¡Tía! ¿Sucede algo?-, Dijo rápidamente mi prima, sonaba genuinamente sorprendida, a pesar de que ya había sido previsto por ella, -Bueno es que tardaron mucho y subí a ver que estaban haciendo ustedes dos-, Dijo mi madre dando una mirada al cuarto y en especial a ella, la rojura de su cara no la sorprendió ya que la había escuchado reír hace un momento,-Tía no te vayas a enojar con Ivan, es que le comente que quería comprarme una y me estaba demostrando que la Xbox 360 era la mejor opción-, Dijo mi prima al ver que su mirada no se apartaba de ella.
Mi madre rápidamente se disculpó con ella, por habernos interrumpido y nos dejó, incluso pudimos escuchar como le decía a su hermana, -Esos cabrones se pusieron a jugar video juegos-.
Joder todo esto... lo había planeado incluso predijo lo que iba pasar y... y... ¿Y ahora qué?
Grande fue mi sorpresa ese mismo día, al saber que la razón de su visita fue para informarle a mis padres y a mí, que se vendrían a vivir aquí a la misma ciudad, que nosotros.
Como se imaginarán mi madre no cabía de la emoción, mis tíos rían y mi prima… simplemente me sonrió, dándome una mirada depredadora.
Y cuatro meses después de ese día, nada.
Ni una llamada, un mensaje o algo, trate de llamarle unas cuantas veces, incluso le mande algunos mensajes, pero nada, ni una sola señal de vida por parte de ella.
Pensé que tal vez habría sido cosa de una sola vez… alguna locura o impulso de ella, algo pasajero de una sola vez, pero no sabía yo lo equivocado que estaba.
Fue un fin de semana, un sábado por la mañana, cuando recibí una llamada de parte de ella;
-Hola primito-, Dijo con voz cantarina del otro lado de la línea.
-Gabi… ah… ¿Hola?-, Dije torpemente al escucharla, sin saber el porqué.
-Discúlpame por no haberme puesto en contacto contigo, pero digamos que he estado muy ocupada-, Dijo con el mismo tono de voz.
-No… no hay problema Gabi-, Le respondí como pudo, joder el solo hablar con ella, me ponía de los nervios.
-Bueno en realidad, te llame para pedirte un favor-, Me dijo rápidamente, sintiéndome tan tonto, porque me imagine, que mi vida giraría en torno a una serie de favores por ella.
-Si prima… claro en lo que sea-, Me di un golpe mental por ser tan lame suelas.
-¿Me preguntaba si podrías ayudarme a lavar la piscina?-, Me pregunto, sabiendo bien que tenía una sonrisa al saber que no diría que no.
-Claro prima, no hay problema-, Le dijo sonando decepcionado de que ahora pasaría mí fin de semana limpiando una jodida piscina.
-Ok, la dirección XXXX en la calle OOOO casa número XXX-, Me dio la dirección y colgó sin dejarme responder.
Suspire con pesar, ya comprometido y sin saber él porque me aliste para hirme, me cambie, colocándome una calzoneta corta y una camisa sin mangas, para no sofocarme con el calor del verano.
Tome mi bicicleta y me puse en marcha, mientras iba de camino, me puse a pensar en aquel día, joder que habría sido todo eso, aunque estuviera excitado, era tan surreal el recuerdo.
Después de unos buenos 30 minutos pedaleando llegue a la casa de mi tía, y si se preguntan el por qué mi familia y yo no habíamos ido aun a la casa de mis tíos, pues es simple, mis tíos todavía estaban trasladándose desde sus puestos de trabajos aquí, al parecer ellos se dedican a la producción de unas piezas especiales con maquinaria especial y pesada, resultando en que trasladar esas máquinas estaba siendo algo difícil y complicado.
A sí que si estaba curioso (por no decir que emocionado y esperanzado de que tal vez se diera algo más con ella), cuando al fin llega a la dirección que se me había dado.
Una casa… común en lo que cabe, dos plantas, jardín delantero con estacionamiento y garaje, no especial, y la llame para asegurarme de que era la dirección correcta;
-Creo que ya estoy aquí-, Le dije una vez que me contesto.
-Si te estoy viendo desde la ventana-, Me dijo dándome cuenta de su presencia en lo que supongo que era la ventana de la sala.
Camine con la bicicleta al lado cansado y molesto por ser un idiota, pero rápidamente me retracte de ese pensamiento cuando mi prima Gaby abrió la puerta, lleva una simple camiseta blanca de esas que se usan en los concursos de camisetas mojadas, sin sostén, haciendo visible sus pezones atreves de la tela, portando un bikini (creo) de ese tipo hilo.
-Hola primito-, Dijo Gabi con una voz cantarina.
Dios pensé por un momento, esas hermosas piernas, con ese bikini, me golpeo justo donde me dolía.
-¿Te gusta lo que ves?-, Me dijo esta vez señalando mi pantalón, en el que se asomaba un gran bulto, como una carpa de circo avergonzándome.
-Lo… lo siento-, Le respondí como el torpe y virgen chico de 20 años que era.
Gabi solo se rio, -Ven vamos, tenemos mucho que hacer-, Dijo esto dándose vuelta, dejándome apreciar ese hermoso culo, dos grandes y gordas mejillas morenas, en las cuales se perdió aquel pequeño hilo, joder, nunca antes una erección me había dolido tanto, hasta ese día.
Creo que mi prima se dio cuenta de la miraba embobada que le estaba dando, entonces se paró en seco y me tropecé suavemente con ella, rápidamente me tomo de las manos, y las llevo hasta sus pechos, -Sé que me he portado mal contigo-, Dijo casi susurrando, mientras movía ese amplio culo en mi bulto, sacando un suspiro de excitación, -Así que si terminamos temprano, te dejare jugar con el todo lo que quieras-, Esto último lo dijo, guiando ahora mis manos, a ese culo, al cual le dio un fuerte apretón, ganándome esta vez un suave gemido de mi prima, -Bueno, a trabajar-, Dijo esto alejándose y saliendo al patio y como buen he idiota joven, salí detrás de ella.
Recibido por una radio con lo mejor del rock en inglés del verano.
Durante todo este proceso, siempre miraba a mi prima, ver ese culo, botar, moverse y rebotar valía la pena el trabajo duro y el sol calcinante.
Varias veces mi prima me lanzo miradas de trabaja más rápido, a lo que solo volvía a lavar la piscina.
Fueron unas 3 horas de fregar, restregar y enjaguar para terminar de lavar la piscina, habíamos empezado a eso de las 10:30 y termínanos casi a la 1:00 de la tarde, así que mire a mi prima tímidamente, quería… “cobrar” pero no sabía el cómo, entonces mi prima me dio una mirada con una pícara sonrisa;
-Bueno, no terminamos temprano, pero tampoco tan tarde, así que creo que te ganaste algo-, Dijo acercándose dando un bamboleo a ese monumento de la humanidad, poco parecía preocuparle que alguien fuera a vernos, incluso a mí no me importaba, debido a que estábamos en la parte más profunda de la piscina.
Cuando por fin quedamos cara a cara, ella me planto un beso en mis labios y joder nuevamente, fue un beso sabor canela, lengua contra lengua, tan dulce, que parecía que fuéramos una pareja casada de años.
Mis manos fueron guiadas por ella misma, a su culo, joder poder volver agarrar esos jamones me puso a temblar de la emoción, las piernas me temblaban, mientras plantaba besos tras besos, separándonos únicamente por aire.
Motivado separe sus nalgas, tomándola por sorpresa, haciendo que el proceso se separara un poco mí, -Ten cuidado, ¿Entendido?-, Me dijo suavemente, a lo que le respondí con un simple asentimiento de cabezo para después darle otro beso.
Poco a poco iba tanteando que tanto podía avanzar, separa sus nalgas con suavidad, buscando exponer aquel anillo, cada vez más motivado por los gemidos que me daba cuando nos separábamos, por aire.
-Trata de… separarlas más…-, Me dijo casi susurrando, a lo que, emocionado, agarre un poco más sus nalgas y separándolas completa mente, expuse al mundo aquel glorioso anillo, a través del bikini de inmediato pude sentir a mi prima, flexionar sus músculos tratando de cerrarlo, a lo que comencé a luchar con ella, por dejarlo abierto.
Nos separamos de los besos dándonos mutuamente miradas picaras, creo que esta fue la primera vez que hacia algo así y por como actuaba Gabi, siento que no era su primera vez.
Estuvimos un buen rato en ese juego, yo cada vez intentando abrir ese anillo y Gabi tratando de cerrarlo, entre risas y besos, sintiendo como un niño al cual le dieron el juguete que tanto quería.
Sabía que ella también estaba jugando conmigo, sus manos nunca se separan de mi cuello, dejándome atrapado, con una erección que se había vuelto dolorosa, podía sentir las venas de mi miembro palpitando, gritando por atención, esperaba ansiosa mente otra de esas alucinantes mamadas, pero de repente y sin aviso, Gabi se separó de mí.
-Eso estuvo alucinante-, Dijo mientras salía de la piscina, acomodándose el bikini, -Pero te dije que no terminamos a tiempo-, Mire decepcionado, incrédulo y molesto, el cómo no solo jugo conmigo, si no que dejarme ahí con una erección que gritaba por atención.
Entonces mi prima se volteo, me dio esta vez una inocente sonrisa y me dijo: -Acompáñame-, rápidamente corrí detrás ella, para alcanzar a ver como esa tanga se deslizaba por sus piernas.
Seguí a mi Gabi embelesado viendo botar esas nalgas, embelesado por esas mejillas, sin darme cuenta de que habíamos entrado al baño.
-Desvístete-, Dijo ella haciendo una seña, mientras se quitaba su camisa, tacones y bikini para entrar a la ducha, intente torpemente desvestirme lo más rápido que pude, al ver lo que tenía delante de mí, tanta fue la prisa que me caí, ganándome una burla de mi prima, -Calma primo, no me voy a ir a ningún lado-, Dijo de manera tan calmante, que me dio escalofríos.
Cuando por fin me desnude y entre, me sorprendió el golpe de agua fría que salida de la ducha, -Lo siento primito, pero hace calor-, Me dijo como disculpándose, pero al mismo tiempo no.
Cuando por fin entre bajo el chorro de agua fría, sentí mi erección aliviarse pero rápidamente las manos de Gabi lo atraparon empezando un dulce masaje, -Se está poniendo flácido-, Dijo mirándome fijamente, -Hagamos que se ponga duro de nuevo-, Dijo esto a la par que se ponía de cuclillas, con un suave toque de sus labios sobre mi glande, provoco en mi como por décima vez un calosfrió que recorrió toda mi espalda, pude sentir su lengua solo acariciando la punta del miembro.
El toque no fue como aquella vez brusco, fue sumamente suave y delicado, pronto mi miembro fue engullido por completo y pude observar como Gabi, pronto dirigió sus a su vagina para jugar con ella, observe emocionado el cómo jugaba con su clítoris, mientras su mamada continuaba sin parar, sentía como mis piernas temblaban y su lengua se envolvía en la cabeza de mi pene.
-Dios Gaby… eres increíble-, Dije en medio de un jadeo, Gaby entonces paro con la mamada, separándose de mi pene con un último y sonoro beso.
-Te toca-, Dijo casi en un susurro y no tarde ni un minuto en darme cuenta a que se refería, cuando me puse de rodillas, he engullí su sexo, joder probar mi primera vagina, fue simplemente… magnifico y erótico.
Joder probar y saborear todo aquello, ha día de hoy me pone duro, sentir las manos de Gabi en mi cabeza, manteniéndome en su vagina y guiando los movimientos de mi lengua y boca, sus jugos sabían tan bien, imaginando que algo así podría pasar, Gabi debió perfumarse o limpiarse con alguna loción de sabor frutal.
De un momento a otro, Gabi me aparto, mire de cerca sus dedos masturbándose y soltando un fuerte gemido, el agua que aun corría, me impidió ver como sus jugos corrían por sus muslos, mire como levanto sus dedos y los lamios con deleite.
Me levante y desesperado busque nuevamente sus labios, besándonos en un frenesí.
Pronto Gabi cerró el flujo de agua y saliendo ambos empapados, dejamos el baño y ahora guiado por Gabi quien me tomo de la mano, fuimos hasta una habitación con una cama matrimonial, dándome a entender que esta era la habitación de mis tíos.
Pero antes de que pudiera decir algo o protestar, mire a Gabi recostarse en la cama, abriendo sus piernas de lado a lado, dándome una vista maravillosa de su todo se sexo.
En ese momento poco me importaba de quien fuera la cama, una vez más, hundí mi lengua en su ser, saboreando nuevamente su sexo pero esta vez no quería eso…
-Gabi… yo… quiero… probar-, No sabía cómo pedírselo, ni siquiera sabía si podía pedírselo, Gabi me miro por un momento, antes de sonreír, soltar sus piernas abiertas y darse la vuelta, para luego apoyándose en su pecho y parando sus nalgas en el aire, para que luego ella tomara sus nalgas y las separara, siendo saludado por aquel pequeño anillo, depilado y por extraño que suene soltando un dulce aroma frutal, permitiéndome imaginar que ha sabiendas de lo que iba a pasar, Gabi se dio un pequeño enema de alguna loción o algo así.
Pronto abandone mis pensamientos cuando Gabi me lanzo… “un guiño de culo”, motivado, deseado, excitado, eufórico, no sé en realidad que me paso, pero respondí al saludo con mi lengua, ganando un pequeño gritito de ella.
-A la próxima avisa primito-, Dijo Gabi acomodándose, para dejar que mi lengua entrara más en su ser, estando en esa posición, aproveche para jugar con su vagina, ya húmeda aproveche para introducirle un dedo, mientras mi lengua exploraba su ano y solo puedo decir joder…
Sabía que un momento así seria increíble, pero esto estaba a otro nivel, Gabi gemía mientras yo movía mi dedo en su vagina y mi lengua en su culo, aprovechando mi mano libre para masturbar mi adolorida erección.
Tal vez sería por mi falta de experiencia en el sexo, o porque tarde demasiado en penetrarla pero me sentí cerca del climax, me separe de ella, para decirle a Gabi, -Estoy a punto… de correrme-, Entonces Gabi se levantó se acomodó nuevamente y en la cama.
-Escucha primito, quiero que te subas encima y me la metas de golpe, todo, sin lubricante y nada más-, Dijo Gabi sonriéndome, pero dejándome un poco inseguro le dije, -¿No te va a doler?-.
Gabi me miro por un momento, antes de responder, -Digamos que me gusta que duela un poco-.
-¿No debería usar un condón?-, Volví a preguntar, aun nervioso y sin subirme a la cama.
Gabi rodo los ojos, antes de responder algo enojada, -No puedo quedar embarazada por el culo-.
-No me refiero a eso… no podríamos conta…-, Trate de decir pero Gabi me interrumpió bruscamente.
-¡Escucha si crees que voy por ahí dándole el culo a cualquiera no es así!-, Se escuchaba muy molesta, -¡Y si no quieres coger dímelo y todo termina aquí!-, Sintiéndome como un verdadero idiota me subí rápidamente a la cama y acomodo mi pene entre sus nalgas, Gabi no me miro ni dijo nada más, estando así, me acerque a su rostro y plante un beso en sus labios, el cual fue respondido.
-Perdón por arruinar el momento-, Me disculpe con ella tratando de reducir la tensión entre los dos.
Gabi me miro por un momento y suspiro; -Está bien primito, solo no pienses mucho las cosas y has lo que yo te digo-, Me dijo a la par que me devolvía el beso, pronto los besos se intensificaron, se volvieron frenéticos, y me ereccion pronto volvió a doler.
Me separe de ella, apunte mi pene en su la entrada, sintiendo como su ano, se contraía invitando a mi pene a penetrarlo, la mire por última vez, ella solo asintió y con todas las fuerzas de mi cadera la penetre, fuerte y profundamente.
No mentiré, por un momento sentí que mi pene se había desgarrado porque también había dolido, pero me imagino que de la misma manera, que le había dolido a ella.
Gabi soltó un fuerte grito, trato en bano de ahogarlo en el colchón de la cama undiendo su cara en este pero no pudo, -¡Ahhh! ¡Joder! ¡Mi culo!-, Grito a la par que agarraba las sabanas con fuerza, mientras que yo en cambio la agarre fuertemente de las muñecas, no solo para apoyarme, si no para mantenerla en su lugar y “poder complacerla”.
Pronto Gabi no pudo seguir en la misma posición y se desplomo en la cama, movimiento al cual seguí sin despegarme de ella, ocasionando una nueva oleada de quejidos y gimidos.
Sentí que mi pene había crecido más, invadiendo su tripa con su longitud, queriendo explorar lo más que se pudiese, pero a pesar de todo el dolor que sentía Gabi y que sentía yo, había resistido el correrme, pero sabía que no iba durar tanto.
Me retire del interior de ella, evitando que su esfínter se adaptara a mi longitud y tamaño, para darle una nueva, fuerte y profunda estocada.
-¡Joderrrr! ¡Duele rico!-, Dijo Gabi casi en un grito.
-Que rico… culo…-, Dije como pudo, casi cegado por la cantidad de sensaciones que estaba sintiendo.
Podía sentir el como Gabi flexionaba los músculos de su culo, presionando con su intestino y esfínter mi pene, aprisionándolo en un “beso”, agarre la barbilla de Gabi para darle un nuevo beso, pero en cambio me sorprendí al ver una cara roja, con mejillas corriendo por sus lágrimas y luchando para que los mocos no salieran de su nariz, lo que significa que había estado aguantando el dolor mejor de lo que yo pensaba.
Con mi mano limpie su cara lo mejor que pude, acercándome para besarla nuevamente.
-¿Estas bien?-, Pregunte como pude una vez que nos separamos del beso.
-Creo… que me desgarraste… el ano-, Me dijo en medio de quejidos, -Pero… no te preocupes… siempre quise que… me rompieran el culo-, Me dijo con una sonrisa rota.
Joder eso había tocado algo en mí, mirándonos fijamente y con una nueva sonrisa de parte de ella, volví a retirar mi pene, -Si… Dios… Joder… Si… Por favor…-, Dijo ella casi riendo, entonces con mis últimas fuerzas volví a introducirme con lo último de mi fuerzas y resistencia en su interior.
Esta vez escuche algo romperse, tal vez mi pene o su ano, no sé pero esta vez libere la carga de semen con la que había estado luchando por mantener, pude sentir como no solo mi pene invadía más aun sus intestinos, si no que la rellenaba con mi semen, cosa que provoco que Gabi se revolvió enloquecida, gritando y al final volví a la cara de Gabi para un último beso y desmayarme del cansancio sobre ella.