October 14

IMAGINA

Imagina una España con un 60% menos de delitos.

Imagina que los 4500 euros mensuales que nos cuesta mantener a cada mena -y a la cohorte de oenegés comisionistas y demás beneficiarios del gran negocio de la inmigración- se pudieran emplear en contratar médicos. Pero médicos de aquí, con sus años de carrera, su MIR y sus especializaciones en lugar de chamanes licenciados en la Universidad Pachamama de Bananocateplelt.

Imagina una Seguridad Social sin colapsar. Imagina unas salas de espera de los hospitales que no parezcan un cuchitril nigeriano, mugrebí o quiteño.

Imagina unos bares donde el camarero no se eternice en atenderte y no te llame "amigo" o "cariño".

Imagina unos vagones del metro que no parezcan y huelan como jaulas del zoo.

Imagina poder pasear por cualquier barrio de tu ciudad sin miedo a que te atraquen o a que violen a tu hija.

Imagina un país en el que las ayudas sociales fueran para familias españolas con problemas.

Imagina que, en lugar de por los grandes oligopolios alimentarios, los precios de los productos básicos fuesen establecidos por el Estado para que los agricultores, pescadores y ganaderos españoles recibiesen una retribución digna y para que llenar la cesta de la compra no fuese un lujo para muchas familias españolas.

Imagina que las naranjas del súper naciesen en Valencia en lugar de venir desde Marruecos o Israel y que los mejillones se hubieran producido en Galicia en lugar de venir de Ecuador o de Ghana.

Imagina una nación con salarios dignos, con seguridad en las calles, en la que tus impuestos se empleasen en mejorar nuestros servicios en lugar de subvencionar nocivos colectivos globalistas o en pagar millonarios sueldos de políticos o de bufones televisivos.

Imagina un Ejército que en lugar de llevar el botijo a los yanquis en sus lejanas guerras de rapiña, defendiera nuestras fronteras y mantuviera a raya a nuestros enemigos potenciales.

Imagina una España con más trabajadores autónomos y menos funcionarios. Con más bomberos y menos burócratas. Con más soldados y menos asesores. Con más fábricas y menos banqueros. Con más pantanos y menos placas solares. Con más centrales nucleares y menos ecologistas subvencionados. Con más honradez y menos escaños.

Imagina una España libre de las imposiciones de Bruselas o de Washington.

Imagina una vida sin la tiranía de las Agendas globalistas. Sin gilipolleces sostenibles ni charos empoderadas.

Imagina...

J.L. Antonaya