Madre e hija organizan una fiesta de cumpleaños para Dani que ninguno de los tres podrá olvidar.
Tras vencer los tabúes y prejuicios, madre, hija y yo decidimos pasar un fin de semana juntos en un lugar apartado.
Una apacible tarde de sábado se transforma en una tormenta. Pero siempre, después de la tormenta, llega la calma. Aunque en esta ocasión, la calma puede haber desatado otra tormenta...⚡
Mi mujer hace algún comentario sobre la relación con mi hijastra que me pone en alerta. Acabo yendo con ella a comprar ropa, y allí ocurre lo inevitable.⚡
Surgen las dudas y los remordimientos. Pero pronto se superan por lo que más une a padrastro e hijastra.⚡
Disfrutando de un crucero y del cuerpo de mi hijastra.⚡
Mi hijastra merece un castigo, y yo se lo doy. Aunque creo que el castigo lo encontró tan placentero como yo.⚡
Mónica y yo compartimos un tórrido día de campo y piscina.⚡
Los prejuicios y la conciencia hacen acto de presencia. Pero el deseo, el morbo y el placer son más fuertes. .⚡
La hija de mi mujer, una jovencita de 18 años, me propuso ser mi amante, y no pude negarme.⚡